La casa es muy grande, al igual que las habitaciones, y lo que más me gustó fue el patio trasero, dónde daba sombra por la mañana y salir a desayunar es una maravilla.
Para pagar obligatoriamente el servicio de limpieza, algunas toallas estaban muy sucias aunque Elena, la persona de contacto allí, en seguida nos la cambió.
Estuvo pendiente en todo momento, respondiendo rápido a mis WhatsApp.
Positivo: la ubicación, a unos minutos a pie de la playa del Arenal, el paseo, las calas cercanas donde practicamos kayak y snorkel, la urbanización con piscina, aire acondicionado en toda la casa y ventiladores de techo en todas las habitaciones... Nos dejaron vino, mantequilla, agua con gas y otras cosas, todo un detalle
Negativo: el lavavajillas no está cuidado (le faltaba sal y abrillantador, creo que desde hacía tiempo). Sal había y pude echarle, pero no abrillantador. La nevera aguantó los diez días aunque hacia hielo por detrás y el calentador se apaga constantemente. Pequeñas cosas que con algo de mantenimiento se pueden resolver.