Si quieres disfrutar de la tranquilidad y del campo es una casa maravillosa, muy bien cuidada y además la piscina es genial. El anfitrión, Diego, es una persona encantadora en todo momento estuvo disponible para todo, cualquier duda, cualquier problema, muy atento en todo. Recomendamos mucho ir a la charca de la nutria y al embalse del cancho del fresno, muy cerca de la casa. Nos lo pasamos genial y mis dos perritos aún más. Volveremos seguro!