Hemos estado en Agosto en esta sorpresa llamada Arcos del Esva. Se encuentra en la aldea de Casiellas, situada en un valle de cuento al lado del rio Esva, río salmonero, en el que también puedes encontrar lubinas en su desembocadura y nutrias esporádicamente en algún tramo. El río tiene numerosas sendas con paisajes preciosos. El pueblo de Casiellas se encuentra a sólo 5 min en coche de dos playas salvajes, Cadavedo y Cueva. En la playa de Cueva desemboca el Esva por un lado y en tan sólo 50 pasos te puedes bañar en agua salada o dulce. Los bosques bajan hasta la playa y el acceso es muy bueno, hay parking, duchas etc. Los apartamentos están muy bien equipados y sobre todo son Ultra silenciosos. Se encuentran en medio de una finca inmensa muy bien cuidada con zona de columpios y pradera para los crios, zona de barbacoas, maizales, huertos con toda clase de frutales y numerosos rincones para echarte una siesta, leer un libro, fotografiar o pasear. La finca está presidida por una casa preciosa de Indianos rodeada de una gran variedad de flora que pertenece a los dueños. Al lado de los apartamentos hay un edificio de piedra restaurado coronado por un horreo que esta habilitado como salón de juegos y lectura. Tiene un futbolín y mesas para que pinten y jueguen los niños. A 10 min en coche estás en Luarca, a 5 min en Cadavedo. La carne de la zona es muy buena, los potes impresionantes, el marisco también y el pescado todavía más. Imprescindibles dos visitas: Puerto de Vega, pueblo a 12 minutos en coche y Cadavedo en las fiestas de la Regalina, romería tradicional con grupos de baile y musica asturiana que tocan y danzan en lo alto de los acantilados al lado de la ermita de la Virgen. Por último me gustaría felicitar a las personas que han hecho de nuestras vacaciones un auténtico lujo: Alfredo y su Familia. Repetiremos, (espero que el año que viene ya empecéis a hacer sidra )
Alex, Himani y Suri